HOLA! Ushuaia debe ser un lugar inolvidable
y me gustaría ganarme el viaje desde ya.
Ahora...escribir por qué me lo merezco...a ver. Lo intento.
Creo que me lo merezco (suena más humilde “creerlo”)
porque tengo una vida agitada, de madre moderna,
que trabaja y que como puede organiza sus días.
Básicamente, me lo merezco porque hace un mes y medio
que se enfermó la niñera de mi hija y estoy “solita mi alma”
yendo y viniendo y viendo que hago, dónde deposito a mi hija,
si me la llevo un rato al trabajo, a lo de una amiga o qué corno.
Mi vida, es una sucesión de transportes, ojo, no viajo lejos
pero el tramo palermo-coghlan, coghlan-palermo,
lo he llegado a hacer 3 veces en un día.
Creo que me lo merezco porque ayer, feriado, lavé dos lavarropas,
colgué, planché, cociné, hice las camas, llevé los chiches del living
al cuarto (mientras mi hija, llevaba otros de cuarto al living) guardé
la ropa de invierno, pasé la aspiradora, y como si fuera poco, me pinté las uñas
(pies included).
Creo que me lo merezco porque como si fuera poco, duermo en
un sofá cama que está absolutamente desvencijado,
Y mi columna es una “S” sumado a que comienzo a creer
que estoy realmente vieja (42) y me despierto todos los
malditos días 2 hs antes de que suene el despertador....
Dije “creo” previendo que no tengo un mérito descomunal.
O al menos, no lo arrastro de toda la vida.
Reconozco que el mes pasado, no me merecía el viaje.
Pero éste mes, si!
Y si no es ushuaia y es un spa en el microcentro, vale tbn.
Para mí y para mi marido que me aguanta en mi días descontrolados.
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